A medida que la pérdida de biodiversidad se acelera a nivel mundial y el calentamiento global amenaza la vida humana y sus modelos de producción, la industria de la belleza quiere contribuir a minimizar el uso de petroquímicos que no solo intensifican la dependencia a hidrocarburos, sino también afectan la salud de los consumidores y sustituirlos por ecoingredientes.


Ante esto, L’Oréal, la compañía de cosméticos más grande en el mundo se comprometió para 2025 reducir en un 95% el uso de petroquímicos en sus maquillajes, productos para la piel y coloración del cabello.